La lluvia y las tormentas no abandonarán el verano, según algunas previsiones.
Después de un invierno largo y frío, Europa occidental, y en concreto Francia y la Península Ibérica, se prepara para un verano que se antoja fresco y húmedo. Según el canal francés Météo, estaríamos ante un escenario probable (un 70%) a un verano sin verano.Cálculos numéricos auguran la persistencia de temperaturas frías durante los meses de junio, julio y agosto, mezclado con lluvias copiosas y aparatosas tormentas. Habrá algunos golpes de calor, pero en cualquier caso, las temperaturas solo remontarán a finales de agosto, y se prolongarán en septiembre y octubre.
Según Méteo, la conjunción de un invierno muy largo y tardío ha aportado enfriamiento a las aguas del mar y una actividad solar que ha devenido en varios meses de debilidad atmosférica, lo que puede tener consecuencias directas sobre las temperaturas de este verano.
Una cuestión psicológica
Pero no todo el mundo es tan pesimista, este lunes, un experto de la Agencia Meteorológica española, asegura que estos fríos de 2013 “son solo psicológicos”. Y se explica en con estos argumentos: los termómetros no han registrado una actividad anormal este año.A pesar de que ha sido una primavera lluviosa y no excesivamente soleada, las temperaturas y las precipitaciones entran dentro de lo que los expertos consideran registros normales. Y puntualiza en elconfidencialdigital.com: “El hecho de que nieve en mayo es recurrente cada cuantos años, de manera que no es un hecho extravagante”.
Fuente: Eleconomista
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